El sociólogo argentino Atilio Boron analiza brevemente la situación de desestabilización en Venezuela.
19/2/14
La amenaza fascista en Venezuela - Una mirada sociológica.
La escalada desestabilizadora que actualmente sufre la Venezuela bolivariana tiene un objetivo no negociable: el derrocamiento del gobierno de Nicolás Maduro. No hay un ápice de interpretación en esta afirmación. Fue expresada en reiteradas ocasiones no sólo por los manifestantes de la derecha sino por sus principales líderes e inspiradores locales: Leopoldo López y María Corina Machado.
En algunas ocasiones se refirieron a sus planes utilizando la expresión que usa el Departamento de Estado: “Cambio de régimen”, forma amable de referirse al “golpe de Estado”. Esta feroz campaña en contra del gobierno bolivariano tiene raíces internas y externas, íntimamente imbricadas y solidarias en un objetivo común: poner fin a la pesadilla instaurada por el comandante Hugo Chávez desde que asumiera la presidencia, en 1999.
Para Estados Unidos, la autodeterminación venezolana –afirmada sobre las mayores reservas comprobadas de petróleo del mundo– y sus extraordinarios esfuerzos a favor de la unidad de Nuestra América equivalen a un intolerable e inadmisible desafío. Para la oposición interna, el chavismo significó el fin de su coparticipación en el saqueo y el pillaje organizado por Estados Unidos y que tuvo a los líderes y organizaciones políticas de la Cuarta República como sus socios menores y operadores locales.
Esperaban unos y otros la derrota del chavismo una vez muerto el comandante, pero con las presidenciales del 14 de abril del 2013 sus esperanzas se esfumaron, si bien por un porcentaje muy pequeño de votos. La respuesta de estos falsos demócratas fue organizar una serie de disturbios que cobraron la vida de más de una decena de jóvenes bolivarianos, amén de la destrucción de numerosos edificios y propiedades públicas.
Se aplacaron porque la respuesta del gobierno fue muy clara y con la ley en la mano y además porque confiaban en que las elecciones municipales del 8 de diciembre, que concibieron como un plebiscito, les permitirían derrotar al chavismo para exigir de inmediato la destitución de Maduro o un referendo revocatorio anticipado. La jugarreta les salió mal porque perdieron por casi un millón de votos y nueve puntos porcentuales de diferencia.
Atónitos ante lo inesperado del resultado –que por primera vez le ofrecía al gobierno bolivariano la posibilidad de gobernar dos años y administrar la economía sin tener que involucrarse en virulentas campañas electorales– peregrinaron a Washington para recibir consejos, dineros y ayudas de todo tipo para seguir llevando adelante el plan. Ahora la prioridad era, como lo exigiera Nixon para el Chile de Allende en 1970, “hacer chirriar la economía”.
De ahí las campañas de desabastecimientos programados, según recomienda el experto de la CIA Eugene Sharp, la especulación cambiaria, los ataques en la prensa en donde las mentiras y el terrorismo mediático no conocían límites y, luego, “calentar la calle” buscando crear una situación similar a la de Benghazi en Libia que desbaratase por completo la economía y generase una gravísima crisis de gobernabilidad que tornase inevitable la intervención de alguna potencia amiga, que ya sabemos quién es, que acudiese en auxilio para restaurar el orden.
Nada de eso ha sucedido, pero no cejarán en sus propósitos sediciosos. López se entregó a la Justicia y es de esperar que ésta le haga caer, a él y a Machado, todo el peso de la ley. Llevan varias muertes sobre sus mochilas y lo peor que le podría pasar a Venezuela sería que el gobierno o la Justicia no advirtieran lo que se oculta dentro del huevo de la serpiente.
Un castigo ejemplar, siempre dentro del marco de la legalidad vigente, y la activa movilización de las masas chavistas para sostener a la Revolución Bolivariana es lo único que permitirá aventar el peligro de un asalto fascista al poder que pondría sangriento fin a la gesta bolivariana. Y lo que está en juego es no sólo el futuro de Venezuela sino, indirectamente, el de toda América Latina.
FUENTE: http://socialismo21.net/la-amenaza-fascista-en-venezuela/
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ResponderEliminarLa opinión del señor Boron carece de anclaje en la Sociología, si se la considera en serio como una Ciencia Social. La opinión del señor Boron sólo es propaganda ideológica. Por supuesto, está en su derecho al expresarse como lo hace en el café o en la asamblea partidista; pero no es correcto que escude las últimas consignas emanadas de la Isla en la Sociología. La desprestigia y se desprestigia.
ResponderEliminarGrandes y sabias palabras. La misma historia de siempre el imperialismo de EE.UU, todo se repite, desde Irak hasta Venezuela pasando por Libia y muchos otros paises atacados por estos asesinos dominadores, ahí la tienen pontencia mundial a base de sembrar muerte pero ssshhh callense debeis ser ignorantes, que son heroes y van a salvar el mundo matando y robando petroleo, instaurando bases militares logisticas, etc...
ResponderEliminarDesde colombia, el pueblo en su mayoria se informa por las noticias que transmiten los canales televisivos nacionales, RCN y CARACOL. En efecto, la idea central que expresan es que Venezuela atraviesa una aguda crisis economica, politica y social, que en consecuencia se ha alzado una ola de protesta mayoritaria, encontra de las nefastas politicas del gobierno venezolado, que es necesario un empoderamiento popular y hacer una verdadera revolucion Bolivariana. Yo me pregunto, si es la fuerza de la derecha, los neofascistas implicados en las periodicas protestas, cuál será la "Revolucion" que pretenden realizar. Toda revolucion implica muertes de personas. Las crisis, generan conmocion social. Pero Enrrique Capriles, qué tipo de Estado Persigue, cuando anteriormente presento vinculos con el partido nacional-socialista. Tal revolucion seguramente implica reconfigurar el progresivo Estado bolivariano, con relaciones sociales comerciales, capitalistas, para realizar unas reformas en funcion del capital privado quienes son los mas interesados en el derrocamiento de Maduro.
ResponderEliminarYo no sé por qué razón estos pseudo intelectuales izquierdistas no aceptan que mí país vive bajo una dictadura comunista, que no sólo asesina y tortura estudiantes, sino que ha entregado nuestra soberanía a Cuba. Si bien es cierto que en 1999 Chávez llegó mediante voto popular, no es menos cierto que con el control absoluto de todos los poderes del Estado degeneró en tiranía; pues era el gobierno de uno sólo, contra toda forma de autonomía administrativa y pensamiento crítico. La Constitución Bolivariana, aprobada con sólo el 10% de participación, recentralizó los poderes en el Ejecutivo lo que, aunado al manejo dogmático de la economía, ha traído como consecuencia la desindustrialización del país, y el declive de la poca economía productiva que teníamos. Hoy en día, casi todo mundo es empleado del Estado, cuyas emisiones de dinero inorgánico (M2), explican el índice de inflación más alto del mundo (56.2%), y las 4 últimas devaluaciones, además de la escazes del 28% en el stock de víveres, medicinas y otrros rubros. Adicionalmente a ello, no hay tratamiento para personas con cáncer, y nisiquiera para tiroides. ¿Qué hicieron con la renta de las reservas probadas de crudo más cuantiosas del mundo? ¿Cómo explicar las fortunas milimillonarias de los "boliburgueses" contratistas del Estado? ¿Cómo explicar que un país que en 1998 exportaba energía eléctrica hoy viva en apagones, y no tengamos ni papel higiénico? Muy simple = zoocialismo! La conexión emocional que sostenía Chávez con un sector muy populoso de la población, fue desgastándose hasta convertirse en resignación; ésta se transformó en indignación tras el asesinato a mansalva de estudiantes desarmados por parte de grupos de paramilitares (colectivos), armados y amparados por el mismo Estado. Solo anoche, vimos cómo barriadas populares de Caracas, como Catia, Coche, Caricuao, entre otras, salieron a cacerolear y a manifestar su descontento. Paren ya de decir que esto es una "lucha de clases", orquestada por la "derecha fascista y el imperio". Noten que la protesta es policlasista, y que este pueblo está siendo masacrado en las protestas, mientras los petrodólares compran conciencias nacional e internacionalmente. Ah, no traigan a colación el argumento de las elecciones ganadas, porque no habiendo independencia de poderes, el venezolano vota - y mucho -, pero jamás elige.
ResponderEliminarPerdón, pero esto no es un análisis sociológico, es más bien un discurso panfletario, con un poco de teoría de la conspiración. No se necesita ser sociólogo para que en Venezuela sucede algo mucho más complejo de lo que plantea este caballero. Detrás de las manifestaciones no hay simplemente "el fascismo" (término usado indiscriminadamente por los izquierdistas para desdeñar a quien no piense exactamente igual que ellos), sino que hay verdaderas razones de descontento y jóvenes que ni son de derecha, ni mucho menos fascistas, pero que están hartos de la situación. Es lamentable que las filias y fobias políticas personales hagan a un profesional intepretar un asunto muy complejo como si se tratara de un asunto de buenos y malos.
ResponderEliminarEs importante no olvidar el ejercicio de hacer análisis social y político; el paradigma de las etiquetas eurocéntricas (facista, izquierda, derecha, conservador) está en crisis y con artículos como estos, evidenciamos porqué la sociología y la ciencia política arrastran esa crisis también. Justamente hoy me llega la carta de Rubén Blades, un esfuerzo interesante desde el mundo del arte, de hacer un análisis que vaya más allá de los viejos esquemas, clichés y espacios comunes que tan poco contribuyen a la ciencia social y a la sociedad. Copio el link de la carta, y siento el deseo de decir que en más de una ocasión el mundo del arte se muestra a la vanguardia de los tiempos incluso en este tipo de situaciones de conflictos socio-políticos. https://redaccion.lamula.pe/2014/02/20/ruben-blades-le-envia-carta-a-nicolas-maduro/jorgepaucar/?fb_action_ids=10200904647052351&fb_action_types=og.likes&fb_source=other_multiline&action_object_map=%5B443611119105288%5D&action_type_map=%5B%22og.likes%22%5D&action_ref_map=%5B%5D
ResponderEliminarNo había leído este artículo y, aunque es viejo ya, me parece importante para los lectores y editores de este blog ofrecer otra mirada sobre lo que vivimos los venezolanos hoy. Y en vez de redactar un largo manifiesto, les voy a colocar enlaces a artículos que he escrito sobre diversos puntos a los que se hace mención.
ResponderEliminar- Comparando los logros sociales de la "revolución bolivariana" con los alcanzados durante los 40 años previos de democracia: http://conjeturasparallevar.blogspot.com/2013/03/sobre-los-logros-sociales-de-la.html
- Sobre la protesta del 12F, razones, discursos y retos de la oposición venezolana: http://conjeturasparallevar.blogspot.com/2014/02/no-somos-mayoria.html
- Gobierno no reconoce excesos en represión y tortura, ¿es efectiva en esos términos una conferencia de paz? http://conjeturasparallevar.blogspot.com/2014/02/trancar-o-no-trancar-he-ahi-el-dilema.html
Inflación y escasez difícilmente pueden ser achacadas al imperialismo cuando la única fuente de divisas es una empresa estatal (Petóleos de Venezuela), cuando para acceder a dólares para importar hay que pasar innumerables controles estatales y cuando la producción nacional prácticamente ha desparecido luego de 15 años de hostigamiento legal a nuestras empresas, expropiaciones e invasiones.
La segunda tasa de homicidios más alta del continente difícilmente es responsabilidad de alguien distinto al estado venezolano que a lo largo de este período ha estado más ocupado en mantenerse en el poder y ganar simpatías internacionales mediante la chequera petrolera, que en garantizar la vida de sus ciudadanos.
Luego de casi 1 mes de protestas en varias ciudades del país, el saldo es más de 20 muertos, más de 30 personas torturadas, oficiales de la Guardia Nacional, Policía Nacional y grupos parapoliciales (llamados colectivos) arremetiendo de forma indiscriminada contra vecinos incluso en sus casas.
Les recomendaría a todos que antes de opinar dejen momentáneamente a un lado su prejuicio de "las revoluciones son buenas" e intenten conocer un poco más sobre la difícil situación que actualmente vivimos en Venezuela.
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ResponderEliminarIndudablemente un seguidor de los gobiernos de izquierda. Desconoce la realidad de Venezuela. País sumergido en corrupción, violencia con un gobierno infiltrado por paises y cooperantes de gobiernos poco demócratas. Esperaba un analisis sociologico, no un relato de amor a una revolución destructiva.
ResponderEliminar"Y lo que está en juego es no sólo el futuro de Venezuela sino, indirectamente, el de toda América Latina". Esta reflexión es la que mantiene el apoyo de los demás gobiernos ALBA, saben que caerán como fichas de domino, tambien Brasil podría dar el ejemplo.
ResponderEliminarSr Maao, aunque me gusto tu articulo, reviza lo que es comunismo y lo que es dictadura, estamos muy lejos de esa foto que das a entender, Socialismo izquierda eXtrema si estoy de acuerdo, ojala fueramos via el COMUNISMO (Common) la realidad de Marxs es que ningun pais ni llego al comunismo ni llegara pues en el COMUNISMO se elimina el ESTADO y todo quedaria en COMUN, no existe un pais COMUNISTA en el Mundo pero si existen muchos Socialista Autoritarios..... No se que nos paso en Venezuela los Venezolanos de los 70 y 80 educados y claros sera que nos toco como el dinosauro....
ResponderEliminarHablar del contexto en el que se encuentra Venezuela, es algo complicado.
ResponderEliminarEstamos en el 2018 y seguimos abordando este tema.
No podemos hacer un análisis profundo sobre esto, ya que la información puede ser manipulada a beneficio de terceras personas.
Deberíamos de voltear a ver como la sociedad esta actuando y aspectos influyen en ella para mantener su espíritu de lucha. Como sabemos EU es un país influyente y las especulaciones que se tienen, es que esta influyendo de alguna manera.
Un análisis mas afondo nos ayudaría a determinar que factores son los que influyen en la sociedad.